El actor Mario Casas es de los que cuentan con un metabolismo privilegiado, de esos que de manera natural se fibran a poco que vayan al gimnasio. Repasando sus 10 años de carrera, podría haber rodado todas sus escenas sin camiseta sin el temor de tapar aquí o allí porque se ve el típico michelín que nos atormenta al resto de la humanidad. Sin embargo, el principal reto de este tipo de cuerpos es llevarlos a un extremo o a otro, como en este caso, por exigencias del guión.
«Mi peso está alrededor de los 75 kg.”, nos explica el propio Casas. “Cuando rodé ‘El fotógrafo de Mauthausen’ –la historia del catalán Francisco Boix en un campo de concentración austriaco– perdí unos 14 kg. para meterme en el personaje”. El desafío llegó cuando, bajo mínimos físicos, tuvo que recuperar toda su masa muscular y, además, aumentarla para ‘Toro’. Y aquí es donde está el principal problema: hay que regresar al peso inicial y superarlo pero en forma de músculo, no de grasa, por lo que la dieta y el entrenamiento son mucho más exigentes.
Comienza el entrenamiento
«Fran Carmona es mi entrenador y dietista, quien me organiza las tablas y me va guiando en las comidas”, comenta el gallego. “Entrar en esta rutina con el objetivo de estar fuerte, sano, con energía durante el día te cambia la vida; y además dejé de fumar hace un año y pico”.
En tan sólo dos meses, Houses estaba de nuevo recuperado, pero, ¿cómo lo consiguió? “ Voy al gimnasio cinco días a la semana e intento descansar ”, y dice “intento” porque asegura que “lo que más cuesta cuando empiezas a entrenar y te gusta es descansar, pero hay que hacerlo”.
Su combinación estrella es la que siguen muchos otros deportistas: «Suelo hacer entrenamiento funcional por grupos musculares de dos músculos al día: pecho con triceps o abs con cardio…”. Organizándonos de esa forma, conseguimos «dejar pasar varios días después de trabajar esos grupos musculares –mientras ejercitamos otros– y así descansan hasta que toca trabajarlos de nuevo».
El secreto del boxeo
Además de la rutina de hierros, el actor descubrió el boxeo hace unos meses. “ Lo combino en el entrenamiento unos cuatro días a la semana. Entreno con un campeón de España de peso pesado, Álex, y esto me sirve de cardio, si no me quedaría en nada”.
Hasta seis comidas al día
“Me levanto muy temprano, tomo un plato de verduras (brocoli, espinacas…) con claras de huevo y pavo. Una hora después me voy al gym. Durante el entrenamiento tomo un batido de proteínas, BCA y glutamina. Más tarde, hago una comida, por ejemplo hoy he comido ensalada de pollo con arroz integral, queso light y frutos secos. Para merendar un batido de frutas y para cenar, pescado. Como mucho pescado”, aclara Mario Casas. “En total, contando batidos de proteínas y todo, hago seis comidas al día y bebo unos tres o cuatro litros de agua para recuperar e hidratar”.
La alimentación, al contrario de lo que muchos piensan, es prácticamente el 80% de los buenos resultados de un entrenamiento. De hecho, según confiesa el actor, ir al gimnasio no le da pereza, pero “los dulces son mi talón de Aquiles, por eso intento comer lo más limpio posible (hidratos integrales, proteínas cocidas o a la plancha, verduras, etc.)”. “Cuando tuve que bajar de peso, sólo podía comer verdura y pescado, así que cuando volví a mi rutina normal los dejé en mi dieta. ¡Y eso que antes las verduras no me gustaban nada!”, comenta entre risas. Y continúa: “En estos tres meses no sólo he entrenado, sino que he cambiado mi manera de comer, y eso me ha cambiado el metabolismo”.
Fuente: www.revistagq.com