¿Qué son los masajes post-entrenamiento?
Los masajes post-entrenamiento son una técnica de recuperación muscular que ayuda a relajar los músculos, acelerar la curación y prevenir la rigidez. Duelen porque, especialmente en el caso del masaje de tejido profundo, se manipulan los músculos para deshacer nudos y contracturas, lo que puede causar una respuesta inflamatoria leve y desgarros microscópicos temporales, similar a la sensación de «agujetas».
- Objetivo: Ayudar a los músculos a recuperarse del ejercicio intenso, reducir la tensión y promover la relajación.
- Tipos comunes: Varían desde masajes suaves para la relajación hasta masajes de tejido profundo para tratar contracturas y nudos.
- Mecanismo: Aumentan el flujo sanguíneo a los músculos, lo que ayuda a eliminar desechos metabólicos como el ácido láctico y a llevar más oxígeno y nutrientes.
- Prevención: Las sesiones regulares pueden ayudar a mantener la flexibilidad muscular y prevenir lesiones.
¿Por qué duelen?
- Manipulación muscular: La presión durante el masaje estira y manipula los tejidos blandos, descomponiendo adherencias y nudos. Este proceso puede ser similar a un entrenamiento, causando sensibilidad y molestias.
- Respuesta inflamatoria: La manipulación puede desencadenar una respuesta inflamatoria natural en el cuerpo, lo que provoca dolor y sensibilidad temporal.
- Metabolitos y microdesgarros: La liberación de desechos metabólicos y pequeños desgarros en las fibras musculares, similar a lo que ocurre con el ejercicio, puede causar dolor al día siguiente.
- Tensión previa: Si los músculos ya estaban muy tensos antes del masaje, el proceso de «desbloquear» puede ser más doloroso.
- Presión excesiva: Un masaje con demasiada presión puede causar un dolor más intenso y prolongado. Es importante comunicarse con el masajista para ajustar la intensidad.

¿Qué hacer si duele?
- Hidratación: Beber suficiente agua ayuda a eliminar los desechos metabólicos.
- Estiramientos suaves: Realizar estiramientos ligeros puede aliviar la tensión muscular.
- Baño caliente: Un baño tibio o caliente puede ayudar a relajar los músculos.
- Comunicación: Si el dolor es intenso o dura varios días, es recomendable hablar con el masajista en la próxima sesión para ajustar la técnica.

Fuente: www.sleimy.es