Son uno de los pilares de una dieta sana. Las frutas se convierten en un excelente aliado de nuestra figura y son uno de los alimentos más saludables a nuestro alcance. Y ahora, en verano, tenemos un amplio abanico de opciones, muy refrescantes a nuestra disposición. Siempre debemos mantener la hidratación bajo control pero en verano aún debemos ser más cuidadosos porque el calor provoca una mayor pérdida de los líquidos que necesitamos. “Las frutas de verano son perfectas para ayudarnos a cumplir este objetivo”, nos cuenta Magda Pérez, coach nutricional de los centros Carmen Navarro, quien añade, además que a través del sudor eliminamos sales minerales que necesitamos recuperar. “Con las frutas conseguimos el aporte de vitaminas y minerales óptimos para nuestro organismo y para nuestra piel”, nos cuenta. Por su parte, la doctora Mar Mira, de la Clínica Mira+Cueto, añade que «la fruta en general es un buen antídoto para la celulitis y favorece la pérdida de peso por su bajo contenido calórico, sus propiedades diuréticas y detoxificantes, su contenido en fibra y efecto saciante. Además apenas aportan grasas».
Sandía
Es, no hay duda, una de las ‘reinas’ del verano. Además de ser fuente de magnesio y potasio que perdemos a través del sudor, tienes que tener en cuenta que el 90% de su contenido es fundamentalmente agua. Además, la experta nos cuenta que su aporte de firma mantiene controlado tu tránsito intestinal. Y no olvides que su aporte calórico es mínimo. Con ella se pueden preparar desde sorbetes, gazpachos, zumos, gelatinas, polos refrescantes, brochetas… infinidad de combinaciones para hacernos el calor mucho más llevadero y para mantener nuestro peso y nuestra piel perfectos. Hasta nos ayuda a mejorar la producción de colágeno y mantiene la piel hidratada. Además, al ser fuente de antioxidantes nos ayuda a combatir los radicales libres para prevenir la aparición de manchas y ralentizar la aparición de arrugas.
Melón
Es otro de los grandes protagonistas del verano. Aunque nos aporta más calorías que la sandía, lo cierto es que su efecto diurético nos ayuda a detoxificar y de manera paralela mantiene nuestra hidratación a raya. Las Vitaminas A, B y C que contiene, así como hierro, potasio o magnesio y su aporte de fibra son la clave para mantener el organismo reforzado y sin toxinas.
Cerezas
Aunque parezca mentira, las cerezas contienen un 85% de agua y además nos aportan antiocianinas, antioxidantes que nos ayudan a mantener un corazón sano, así como melatonina y betacaroteno, el mejor aliado de la piel, que prolongará además la duración de tu bronceado. Además, solo aportan 60 calorías por cada 100 gramos y son nuestras aliadas a la hora de mantener nuestra salud ósea a raya. Nos aportan también potasio y magnesio.
Ciruelas
En ellas, además de su aporte de agua (el 83% de su contenido), es importante destacar que nos aporta fibra, y los hidratos de carbono que proporciona son saludables para nuestro organismo. Contiene también betacarotenos, que protegen y dan ese color saludable a tu piel y son fuente de potasio y hierro, claves para mantenernos fuertes y sanos. Nos ayuda también a evitar a la retención de líquidos.
Melocotón
Es también altamente hidratante. El 87% de un melocotón es agua y apenas aporta calorías. Su contenido en vitamina C es elevado y también cuida de la salud de tu piel por la Vitamina A que encierra. Fundamental su ayuda a la hora de recuperar sales minerales y electrolitos que perdemos con el calor a través de la sudoración.
Papaya
Es quizás más conocida nutricionalmente hablando por sus virtudes para ayudarnos en el proceso digestivo gracias a la papaína. Pero además de estar riquísima sus nutrientes y el agua que contienen favorecen el estado saludable e hidratado de nuestra piel.
Tomate
Sí, lo primero de todo es aclarar que es una fruta. Es uno de los básicos con los que aseguramos la hidratación pero además nos aporta minerales y vitaminas, Vitamina C, Vitamina A y K, Hierro, potasio… y es un antioxidante natural, sobre todo por el licopeno que contiene. Se absorbe mejor si lo cocinamos, pero de cara al verano nos apetece más consumirlo fresco.
Jugo de coco
La experta de los centros Carmen Navarro nos cuenta que es tan rico como hidratante y poca gente sabe que sus minerales y vitaminas dejan la piel suave e hidratada.
Aguas de frutas
La experta nos da una última sugerencia que nos echará una mano para mantenernos hidratadas: tomar limonadas caseras o “aguas de sensaciones” aprovechando las frutas de temporada. “Son magníficas, y si haces cubitos de hielo con la limonada que te sobra también podrás llevártela a la playa en una botella isotérmica manteniendo todas sus propiedades”, concluye Magda Pérez.
Fuente: www.hola.com
