1. Deshazte de lo innecesario:
Antes de comenzar a organizar, revisa tus utensilios, platos, electrodomésticos y alimentos en busca de elementos innecesarios o caducados. Dona o desecha lo que ya no uses y así liberarás espacio para los elementos esenciales.
2. Agrupa por categorías:
Clasifica tus utensilios y alimentos por categorías. Por ejemplo, agrupa todos los utensilios de cocina juntos, los condimentos en un área específica y los electrodomésticos en otro. Esto facilitará la búsqueda y evitará la dispersión de elementos por toda la cocina.
3. Utiliza organizadores y contenedores:
Maximiza el espacio en tus cajones y armarios utilizando organizadores y contenedores. Puedes utilizar separadores de cajones para dividir utensilios, contenedores transparentes para almacenar alimentos a granel y organizadores de especias para mantener los condimentos ordenados.
4. Aprovecha el espacio vertical:
No olvides aprovechar el espacio vertical en tu cocina. Instala ganchos en la pared para colgar utensilios o paños de cocina, utiliza estantes adicionales para aprovechar la altura de los armarios y considera colgar ollas y sartenes en una rejilla para liberar espacio en los armarios.
5. Organiza según la frecuencia de uso:
Coloca los elementos que utilizas con mayor frecuencia en áreas de fácil acceso, como los cajones superiores o los estantes inferiores. Los elementos de uso menos frecuente pueden almacenarse en lugares más altos o menos accesibles.
6. Etiqueta los recipientes y estantes:
Etiqueta los contenedores y estantes para mantener todo en su lugar y facilitar la identificación rápida de los elementos. Utiliza etiquetas claras y legibles para identificar ingredientes, especias y utensilios.
7. Mantén una estación de preparación eficiente:
Crea una estación de preparación centralizada en tu cocina. Coloca los utensilios esenciales, como tablas de cortar, cuchillos y cuencos, cerca de esta área para evitar movimientos innecesarios mientras cocinas.
8. Optimiza el espacio de almacenamiento:
Utiliza organizadores de estantes, cestas o estantes deslizables para aprovechar al máximo el espacio en tus armarios. Apila ollas y sartenes de manera ordenada y utiliza organizadores de tapas para mantenerlas en su lugar.
9. Mantén una despensa ordenada:
Si tienes una despensa, organízala de manera eficiente. Almacena los alimentos en recipientes herméticos para maximizar el espacio y mantener los ingredientes frescos por más tiempo. Organiza los alimentos por categorías y fecha de vencimiento.
10. Limpieza regular:
Finalmente, mantener una rutina de limpieza regular es esencial para mantener tu cocina organizada y eficiente. Limpia los mostradores, los electrodomésticos y los utensilios después de cada uso. Realiza una limpieza profunda periódica, incluyendo la limpieza de los armarios, estantes y despensa. Mantener una cocina limpia te ayudará a encontrar lo que necesitas rápidamente y a mantener un ambiente saludable para cocinar.
Fuente: www.storecloen.com