También conocidos como ejercicios aeróbicos, son actividades físicas que aumentan la frecuencia cardíaca y la respiración, mejorando la salud del corazón, los pulmones y el sistema circulatorio.
Es fundamental priorizar la recuperación con estiramientos suaves, nutrición adecuada y descanso. La combinación de estos elementos ayuda a reparar el daño muscular.