Afortunadamente, puedes proteger tu piel para el resto día, ¡todo mientras ahorras tiempo cuando te preparas por la mañana! Aquí hay seis consejos para el cuidado de la piel que cada viajera debe incorporar a sus rutinas diarias.
1. Haz una doble limpieza antes de salir
No queremos decir solo restregar más fuerte. Antes de salir de tu casa, prepara tu piel para hacer frente a los efectos de sentarte con tu maquillaje y protector solar (sin mencionar toda la suciedad que encuentras en tu viaje diario) con un limpiador suave, como agua micelar de limpieza u otro limpiador de base aceitosa. Ahora que tu piel está preparada para una limpieza más profunda, puedes limpiarte los poros con un gel hidratante o un limpiador purificador para minimizar el exceso de grasa y retener la hidratación.
2. Mantén la humectación
Entre los atascos, los trenes tardíos y la exposición a los rayos UV, así como los radicales libres dañinos, tu viaje es estresante. Con el tiempo, eso puede envejecer tu piel, según un estudio publicado en la revista Biomolecules. Afortunadamente, tienes un arma secreta contra los señales del envejecimiento: la humectación. Aplicar una crema humectante por la mañana y por la noche puede ayudar a evitar los efectos del estrés (como las arrugas) y a proteger tu piel. Usa un aerosol facial mientras te diriges al tren o a tu automóvil y durante todo el día, según sea necesario, para una protección adicional.
3. Siempre aplica protector solar
Sabes que el protector solar es una necesidad absoluta en los días de playa, pero es igualmente importante tener protección solar durante tu viaje. ¡Así es! Según la Skin Cancer Foundation, los rayos UVA están presentes durante todo el año, incluso en días nublados, y pueden pasar a través de las ventanas del automóvil. La sobreexposición prolongada puede provocar signos prematuros de envejecimiento, por lo tanto, mantente protegida con un envase pequeño en tu bolso o maletín.
4. Pon atención a la hidratación
Lo más probable es que tu viaje diario te haga sentir con más sed. Tu piel también siente esa deshidratación, lo que significa que mantener la hidratación es muy importante. Beber agua durante todo el día no solo hace que tu cuerpo funcione sin problemas, sino que también repone sus células y elimina la piel seca y escamosa. Para una hidratación adicional, termina tu rutina nocturna con una máscara hidratante. ¡Además de las mascarillas faciales, puedes encontrar máscaras corporales formuladas específicamente para manos y pies!
5. Protege de la contaminación
Dado que la contaminación puede exponer la superficie de tu piel a los radicales libres y provocar inflamación, los sueros y cremas ricos en antioxidantes son una incorporación inteligente a tu rutina diaria del cuidado de la piel. Los antioxidantes como la vitamina C son efectivos para neutralizar los radicales libres, aumentar la producción de colágeno de la piel y fortalecer sus defensas naturales, según un estudio de Nutrients. Un envase pequeño de este poderoso defensor puede caber fácilmente en un bolso o bolsillo: solo necesitas dar un toque (o dos) a la vez.
6. Exfolia regularmente
Este paso es mejor guardarlo para el final del día. Ya sea que uses un cepillo de limpieza facial, un exfoliante o un exfoliante químico, tu piel se beneficia al desprender suavemente la capa superficial de las células muertas dos o tres veces por semana. No solo revela la piel más lisa y fresca que se encuentra debajo, sino que también ayuda a aumentar la circulación para una piel más saludable.
Ir y venir de la oficina día tras día puede afectar tu piel, pero no se necesita mucho trabajo para mantener lograr una piel saludable y radiante. No tienes que sacrificarte con una rutina del cuidado de la piel para el camino como esta.
Fuente: https://es.neutrogena.com